Año 3, número 14
H. Puebla de Zaragoza a 14 de septiembre de 2000

Notas para la historia de la
Facultad de Psicología de la UAP*

Facultad de Psicología (3 oriente 403). Inmueble del siglo XVI. Ahí se estableció, en 1582, el Colegio Seminario de San Jerónimo, o Colegio de Estudios Menores de Latinidad. Al presentarse la expulsión de los jesuitas, en 1767, pasó a depender del Real Colegio Carolino. El 30 de junio de 1905, el presidente del Colegio del Estado, José Rafael Insunza, vendió el edificio —a efecto de enfrentar las carencias que vivía la institución en esa época— al señor Rafael Hernández. Con el paso del tiempo el inmueble albergó a la Escuela Normal de Profesoras, a la Aduana, y a las oficinas del Congreso del Estado. El 23 de abril de 1973 fue adquirido por la UAP.
A

unque la psicología como área del saber ya se enseñaba en México desde 1896, no es sino hasta los primeros años del presente siglo que se observa una preocupación creciente por dicha ciencia, tal como lo ponen de relieve las instituciones que surgen para el estudio de la misma, y la notable cantidad de trabajos de psicología que editan en esa etapa.

Si bien la psicología nace y se desarrolla al calor de las instituciones de educación superior, es de subrayar que paralelamente a esta situación crece el interés por ella entre los educadores y pedagogos, una vez que se percatan de los inmensos beneficios que trae consigo para su desarrollo profesional.

La psicología en México se ha desarrollado bajo el influjo de la europea y la norteamericana. En una primera etapa es sumamente notoria la influencia de la psicología francesa (Janet, Pierón, Ribot, etc.), y de la alemana (Wundt y Kulpe, y posteriormente Freud, Jung, etc.). Más adelante, en las décadas de los sesenta y los setenta, la influencia estadounidense desplaza de modo gradual a la europea.

En los años cuarenta y cincuenta, la psicología mexicana se asociaba principalmente al psicoanálisis, a la psiquiatría, a la fenomenología y a la psicometría, tendencias que serán superadas en los años siguientes, aunque sin dejar de ejercer una cierta influencia en la psicología del país.


* Este trabajo se basó en el libro Psicología, UAP, edición especial de la Facultad de Psicología que apareció en 1994.

 

 

 

 

Expansión de la psicología en México
(1960-1981)

El periodo comprendido entre 1960 y 1981 se caracteriza por un notable auge de la psicología, tanto en lo que se refiere a sus aspectos teóricos como prácticos. Mientras que hacia la primera década aludida los psicólogos se limitaban principalmente a trabajar como auxiliares psiquiátricos y como aplicadores de tests, hacia la década de los ochenta ensanchan su radio de acción, actuando en áreas como la educación, las empresas, la industria, la vivienda, y en la investigación de fenómenos como el uso de las drogas.

No obstante, brillaban por su ausencia las investigaciones de carácter científico, y las aplicaciones de la psicología en campos más complejos.

En los últimos 20 años han surgido "nuevos psicólogos" que se esfuerzan por superar ese estado de cosas. Nos referimos sobre todo a los numerosos psicólogos que realizaron estudios de posgrado en universidades norteamericanas y europeas, y, en menor medida, en países de Europa Oriental como Rusia.

A grandes rasgos, el desarrollo de la psicología en nuestro país ha atravesado por las siguientes etapas:

1) La preocupación por crear una psicología científica;

2) La preocupación por crear una psicología "propia",y

3) La preocupación por crear una psicología orientada hacia las necesidades de la sociedad. Cada escuela de psicología va a entender y a tratar de cumplir estas tareas según su orientación.

Antecedentes del ejercicio del psicólogo en México.

Blibliohemeroteca Luis Rivera Terrazas de la Facultad de Psicología

 

La mayoría de los estudiosos de la historia de la psicología en nuestro país coinciden en señalar que un hito decisivo para el ejercicio profesional de dicha carrera tiene lugar en 1937, al crearse un grado académico para la obtención de la maestría de Psicología en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, iniciativa que habría de convertirse en la base para crear la primera escuela de Psicología en México. A este momento podría tomársele como el punto de partida de la Psicología como profesión y ciencia en nuestro medio.

En un principio, por impartirse la psicología sólo en la Facultad de referencia, los psicólogos se limitaban a trabajar como docentes en instituciones de enseñanza media. Empero, una vez que se crea la Escuela de Psicología de la UNAM, el campo de acción de dichos profesionistas se amplía a ámbitos como la orientación profesional y la psicología industrial.

Sin embargo, durante varias décadas se continuó relegando al psicólogo a tareas propias de un técnico, y no de un profesional. Se le restringía, así, al diagnóstico psicométrico (aplicador de pruebas), lo cual propiciaba que sus remuneraciones fuesen muy bajas.

Por razones diversas, al psicólogo mexicano no le era permitido prepararse en técnicas de psicoterapia, ni en las universidades, ni en las asociaciones que perseguían el objetivo de impulsar su superación profesional. Para ello se le exigía, por lo general, haber cursado la carrera de medicina, aspecto que limitaba su campo de acción.

El periodo comprendido entre 1960 y 1981 se distingue por un enorme auge de la psicología en muchos aspectos. Así, en diversas universidades del país se abre esta carrera, ingresando a ella una numerosa población estudiantil, y se generan nuevos campos de investigación y de aplicación de dicha ciencia.

Al promulgarse la nueva Ley de Profesiones y Servicio Social, se incluye por vez primera a la psicología como profesión, que requería de título y cédula profesional, y en consecuencia se le consideró susceptible de reglamentación en su ejercicio.

Situación actual de la psicología en México

Exterior del inmueble que ocupan las maestrías de la Facultad de Psicología de la BUAP
E

n la actualidad, en el país existen alrededor de 40 instituciones de educación superior en las que se imparte la carrera de psicología.

Hacia 1995 había en México cerca de 16 mil estudiantes cursando dicha carrera, 12 mil de los mismos en instituciones públicas, y el resto en universidades privadas. En el año de referencia había alrededor de mil 133 profesores de psicología.

Entre las especializaciones que predominan en esta profesión estan las de psicología clínica, psicología educativa, psicología clínica, psicología industrial, psicología experimental y psicofisiología.

En las universidades mexicanas se extienden los siguientes grados académicos:

a) Licenciado en Psicología (4 a 5 años de estudio);

b) Maestro en Psicología (dos años adicionales); y

c) Doctor en Psicología (dos años adicionales a la maestría)

Cada uno de esos grados académicos exige un trabajo de tesis.

En México existen las siguientes sociedades científicas de psicología:

1.- Desde 1951, la Sociedad Mexicana de Psicología, que forma parte de la Sociedad Interamericana de Psicología y es miembro de la Unión Internacional de Psicología Científica.

2.-Sociedad Mexicana de Análisis de la Conducta, desde 1976.

3.- Sociedad Mexicana de Psicología Clínica.

4.-Asociación de Psicólogos Industriales.

La Sociedad Interamericana de Psicología, aunque no tiene su sede en México, ha ejercido una influencia notable en la vida científica del país. Fundada en 1951, tiene miembros en América Latina, Estados Unidos y Canadá. Actualmente se prepara la formación de una "Unión Latinoparlante de Sociedades de Análisis y Terapia de la Conducta", en la que colaborarán sociedades de Latinoamérica, Canadá, España, Portugal, Francia, Italia y Bélgica.

Hoy en día se editan en nuestro país las siguientes revistas de Psicología: Revista de Psicoanálisis, Psiquiatría y Psicología, desde 1965; Revista Mexicana de Análisis de la Conducta, desde 1975, y la Revista de Enseñanza e Investigación en Psicología, también desde 1975.

En lo que concierne a la investigación en el campo de la psicología, a excepción de la UNAM, la mayoría de las universidades le han concedido muy poca importancia a esta área, aunque se vislumbran señales de que esta situación pronto se superará, tal como lo muestra la experiencia de la Facultad de Psicología de nuestra institución.

La Psicología es actualmente una disciplina sumamente útil para resolver y mejorar muchos problemas que tiene la complicada problemática humana. Quizás el aspecto mas estudiado, tanto a nivel teórico como el práctico sea el clínico. La aplicación de la psicología a la educación; la psicoprofilaxis de situaciones críticas tales como la adolescencia, el parto, los duelos, la elección vocacional etc., constituyen terrenos sumamente propicios para el trabajo del psicólogo.

De colegio a Facultad de Psicología

Personal administrativo de la Facultad de Psicología: Isabel Muñoz Méndez, Hada Lilia Aparicio Campos, Hada Esmeralda Aparicio Campos, Irma Serrano Vázquez, Ana María López López, Luz María Guerrero Gutiérrez.

 

A

l fundarse en abril de 1965 la Facultad de Filosofía y Letras de la UAP, uno de los colegios que la integraban era el de psicología (los otros eran los de historia, letras y filosofía).

Los fundadores de dicha Facultad decidieron crear la escuela de Psicología al considerar que ésta resultaba esencial para coadyuvar al desarrollo de los estudios humanísticos en la entidad, los cuales eran prácticamente inexistentes en ese periodo. Al mismo tiempo, pensaron que a través de dicha carrera nuestra institución podía contribuir a formar profesionistas que contribuyeran a dar respuestas a los grandes problemas y desafíos que se desprendían de la inserción del estado de Puebla en el vasto proyecto de industrialización que surge a nivel nacional a fines de los sesenta, del que se derivó la necesidad de formar a psicólogos —psicólogos industriales, clínicos, etc.— capaces de comprender las vicisitudes y complejidad de las sociedades industriales modernas, por un lado, y, por otro, a psicólogos que contribuyesen a resolver las necesidades planteadas por el desarrollo de la planta productiva.

Había, pues, una clara definición del perfil profesional del egresado de psicología. Lo que no existía era un plan de estudios adecuado, que correspondiese a dicho perfil, lo cual propició que durante los primeros cinco años de existencia del colegio se impulsaran diversos reajustes y modificaciones orientados a la búsqueda de la coherencia interna de las materias y a la delimitación de su extensión y profundidad.

Años difíciles 1970- 1980

Publicaciones de la facultad de Psicología

 

Hacia los primeros años de la década de los setenta predominaba en el colegio la tendencia conductista, la cual era la tendencia predominante a nivel nacional. La planta de maestros estaba integrada principalmente por maestros que se habían formado en dicha corriente, en particular bajo el enfoque skinneriano.

En contrapunto a los esfuerzos por definir la currícula del colegio, en los albores de los años setentas la Universidad Autónoma de Puebla se ve sacudida por varios hechos que impactan de manera dramática su vida interna y las relaciones con su entorno social. Nos referimos al avance que experimenta en esa etapa el movimiento de reforma universitaria, que desde los sesenta se propone impulsar todo un cúmulo de transformaciones que perseguían el objetivo de modernizar la vida académica, cultural y administrativa de la institución, que por ese entonces se encontraba todavía inmersa en la modorra del cacicazgo avilacamachista, el cual había convertido a Puebla en una entidad levítica, saturada de prejuicios, y reacia a asimilar los cambios que había experimentado el mundo en casi todos sus órdenes, particularmente en la ciencia y la tecnología.

Maestría en Neuro psicología y Psicología Social (4 sur 302). Durante mucho tiempo este inmueble fue sede de diversos organismos, entre ellos la Asociación Católica de la Juventud Mexicana. Fue adquirido por la Universidad en octubre de 1994.

 

Por desgracia las "fuerzas vivas" de Puebla, encabezadas por el mismo gobierno estatal y por los sectores retardatarios del clero, lejos de comprender los anhelos idealistas de la juventud, por el contrario desencadenaron contra la UAP una brutal ofensiva enderezada a aplacar el movimiento de reforma, que llegó al extremo de cegar la vida de varios líderes universitarios, entre ellos Joel Arriaga y Enrique Cabrera. Esto propició, como era de esperar, la radicalización del movimiento, abriendo una verdadera "Caja de Pandora" que culminó con la caída del gobierno de Bautista O’Farril, y por ende, con la derrota de las fuerzas reaccionarias que se oponían a la modernización de la UAP.

Empero, no todas las secuelas de dicha radicalización fueron positivas, o beneficiosas para la vida académica de nuestra institución. Así, por ejemplo, diversos grupos universitarios se extralimitaron, tal como sucedió en el Colegio de Psicología, en donde algunos núcleos radicales arremetieron contra varios maestros so pretexto de que los mismos eran "retardatarios" o "reaccionarios" por el solo hecho de estar identificados con la corriente skinneriana. Aquí no podemos ahondar al respecto, porque ello desbordaría los límites de este trabajo. Nos limitaremos a señalar que, aunque en efecto dicha corriente estaba siendo cuestionada en diversos lugares del orbe por la identificación inequívoca de no pocos de sus principales exponentes con el sistema capitalista, ello no justificaba de ningún modo los ataques que se lanzaron sobre los maestros del colegio de Psicología.

Así las cosas, de un día para otro —en 1972— sin argumentos académicos, y guiados sólo por la cerrazón política, los dirigentes estudiantiles del colegio decidieron expulsar un sector importante de dichos maestros, lo cual propició que tal centro de estudios se quedase solamente con la tercera parte de su planta docente, a escasos meses de que diera inicio el semestre. Así las cosas, el colegio entró en una profunda crisis durante varios años, a la que no pudieron superar las medidas aisladas que se adoptaron las autoridades y la comunidad de la escuela para paliar las consecuencias de los atropellos señalados.

Dr. Jean Pierre Deconchi exponiendo su teoría en la Maestría en Psicología Social de la UAP

 

De este modo, de 1973 a 1978 el Colegio enfrentó múltiples problemas y dificultades para abrirle paso a un plan de estudios coherente, que correspondiera a los objetivos que le dieron origen. Uno de los principales obstáculos que se presentaban era la preeminencia de los aspectos políticos sobre los académicos, que llevaron entre otras cosas a la improvisación de docentes, llegándose al extremo de convertir a determinados estudiantes en profesores, sobre todo en los primeros semestres.

Por fortuna, con todo y sus errores y desviaciones, la Reforma Universitaria abrió nuevos espacios democráticos y, sobre todo, delimitó nuevos caminos para la transformación académica. De este modo, poco a poco el colegio de Psicología se adentró por la senda del cambio, sin tropezones dramáticos como el arriba indicado. Entre los hechos que contribuyeron a que el colegio encontrara dicha senda destacan los siguientes: a mediados de los setenta se establece una separación académica entre los colegios que integraban la Facultad de Filosofía, lo cual permitió que cada uno de ellos resolviera de manera más adecuada sus problemas específicos. Por esos años, asimismo, las autoridades universitarias diseñan políticas encaminadas a profesionalizar la planta docente, mejorando los salarios y prestaciones. Del mismo modo, estimulan la consistencia interna de los planes de estudio, la elaboración de perfiles profesionales, y promueven la articulación entre la docencia, la extensión y la investigación.

En ese contexto, el colegio de Psicología reconoce la necesidad de transformar su plan de estudios, empero se le concede prioridad a la organización administrativa, creando las áreas social, educativa y clínica. En 1978 se crea la Academia de Maestros, con la finalidad de elaborar y discutir las políticas académicas y los contenidos curriculares de los programas.

Profesores que han ocupado la dirección de la Facultad de Psicología a partir de la separación de la Facultad de Filosofía y Letras

1992-1995. Psic. Enrique Recio Ávila quien es sustituido por el Psic. Manuel Muñoz y Vargas que concluye el periodo hasta marzo de 1996.

Por elecciones se designa al Psic. Rodolfo Espinosa Fuentes, para el periodo 1996-2000, en noviembre de 1996 por renuncia fue nombrado director interino el Psic. Arturo Meza Mijangos, cumpliendo un periodo de seis meses, ocupando su lugar el Psic. Fernando Turrent Rodríguez a partir de mayo de 1997 a febrero de 2000.

Por elecciones se nombra director al Psic. Fernando Turrent Rodríguez, para el periodo 2000-2004.

La transformación del colegio en escuela,
y posteriormente en facultad

Equipo de basquetbol de la liga universitaria (1994)

 

En los años ochenta surgen nuevos factores que obstaculizan el pleno desarrollo académico del colegio, entre los que sobresalen el forcejeo constante de los docentes por lograr la supremacía política en el seno del mismo. Empero, tales obstáculos no logran frenar el anhelo de la comunidad por abrirle paso a un plan de estudios avanzado y moderno, promoviendo diversas iniciativas enderezadas a dicho objetivo. Entre las mismas, tenemos los trabajos "Notas para la fundamentación de un currículum alternativo del Colegio de Psicología", presentado por Enrique Recio A., y María Esther Martínez F., y el "Proyecto de revisión curricular del área social", elaborado por Rocío Oliveros H. Y Paulina Robles Cabral, que se presentaron en 1986.

Por otra parte, en febrero de 1987 la Academia de Profesores avala la integración de una comisión que se de a la tarea de elaborar un proyecto de transformación del colegio, mismo que culmina en el proyecto "Análisis curricular para la transformación del colegio de Psicología".

En enero de 1988 inaugura formalmente sus actividades el Centro de Investigaciones en Psicología Social (CIPSO), que como parte de sus actividades publica en enero de 1989 el primer número de la revista Alelon.

En 1991, como resultado de la transformación de la Ley Orgánica de la UAP en Ley Universitaria —y del Estatuto correspondiente— el Colegio de Psicología experimenta una serie de transformaciones importantes, que contribuirán de manera decisiva a su consolidación académica. Así, el 2 de octubre del año de referencia, a solicitud del entonces director del Colegio, maestro Enrique Recio, el H. Consejo Universitario aprueba la propuesta de convertir a este centro de estudios en una unidad académica independiente, transformándose de esta manera en escuela. Pocos meses después, el 13 de mayo de 1992, el mismo H. Consejo Universitario aprueba la creación de la Maestría en Psicología Social, permitiendo así que la escuela de Psicología se convierta en facultad.

Paralelamente a esos avances, la Facultad experimenta cambios trascendentes que le permiten avanzar de manera notable en su desarrollo académico. Entre otras cosas se impulsa una nuevo plan de estudios para la licenciatura más coherente, actualizado y versátil, que incorpora las invaluables experiencias pedagógicas de la planta docente. Tal plan se pone en marcha en el segundo semestre de 1992.>

Es de subrayar que, pese a los logros conseguidos, la comunidad de la actual Facultad de Psicología no "ha bajado la guardia" en cuanto a su afán de proseguir superándose académicamente. Por ello, pese a que el plan aprobado en 1992 no ha sufrido alteraciones sustanciales hasta hoy, existe consenso entre los miembros de la escuela acerca de la necesidad de revisar el plan de manera permanente, en aras de asegurar su vigencia.

Rafael Serrano: precursor de la Psiquiatría en Puebla*

N

ació en Puebla en diciembre de 1857 y murió en febrero de 1927. Cursó estudios en el Seminario Conciliar de Puebla y concluyó la carrera de medicina y cirugía en el Colegio del Estado, en 1884.

Desde muy joven destacó por su sed de conocimientos, lo cual lo convirtió en un verdadero enciclopedista. Aparte de estudiar las carreras de leyes de ciencias físicas, se especializó en psiquiatría y criminología, haciendo numerosas aportaciones a estas ciencias. Entre las mismas destaca su trabajo Fragmentos de Psiquatría Óptica, publicado en 1884.

No conforme con incursionar en las más diversas áreas del conocimiento, Rafael Serrano brilló como profesor, y como conductor de diversas instituciones educativas y médicas. Así, fue director del Colegio del Estado de 1921 a 1924, siendo la única persona a quien se le ha concedido el nombramiento de Director Vitalicio de dicha institución.

Sus méritos en el campo de la docencia lo llevaron a recibir del gobierno del Estado la Palma de Oro, como decano de los maestros de Medicina.

Una de sus principales preocupaciones fue el impulsar iniciativas orientadas a la salud y protección de los enfermos mentales, actividades que cristalizó sobre todo al participar en la conducción de los hospitales de hombres y de mujeres de Santa Rosa y San Roque.

Rafael Serrano

Junto a otros destacados médicos, delineó en el Hospital General del estado una estrategia sanitaria general para el Estado de Puebla.

También fue director de la Escuela Normal, donde tuvo a su cargo la cátedra de Filosofía, misma que dictó en el Colegio del Estado. Representó a la facultad de Medicina en diversos congresos nacionales e internacionales.

En el curso de su fructífera vida formó una notable colección de libros, de los cuales diez mil volúmenes constituyeron el Fondo Serrano de la Biblioteca Lafragua.

Dadas sus aportaciones al campo de la psiquiatría y al cuidado de los dementes, las autoridades del estado decidieron darle su nombre a la principal institución psiquiátrica de Puebla, también conocida como "El Batán", como homenaje a su memoria.

En un emotivo homenaje que le brindó el Colegio del Estado el 12 de marzo de 1927, el licenciado D. Atenedoro Monroy expresó : "Si es verdad que (Rafael Serrano) abarcó en toda su inconmesurable extensión el horizonte de las ciencias médicas y sus auxiliares, no encerró en ellas, con ser tan dilatadas y complejas, su infatigable actividad y práctica civil, ni aun dentro de la Biología, la Clínica General, conformóse con sólo el título de facultativo en Medicina y Cirugía. Antes bien, por una parte, se ejerció y adiestró en otras muy variadas y provechosas disciplinas, y otra parte, se entregó con vida y alma a una de más difíciles, profundas, filosóficas, nobles y humanitarias especializaciones del arte científico de curar, la Patología mental, la Siquiatría, en que pronto ciñó a su frente lauros inmortales...".


 

*Para la elaboración de esta nota nos basamos en el libro de Alberto Pérez Peña, El Colegio del Estado de Puebla, En el primer centenario de su vida civil, 1925 (Facsímil), BUAP, 1998.

  »Gacetas 2000

| Comentarios y Sugerencias: df e-mail: tiempo@siu.buap.mx |

Tiempo Universitario es una publicación del Archivo Histórico Universitario de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla
Aparece quincenalmente. Esta publicación se puede adquirir en la Casa de la Memoria Universitaria,
Archivo Histórico Universitario, Avenida Reforma 531, Puebla, Puebla, Tel. (01 222)  2 32 74 79.
Se aceptan colaboraciones de investigación sobre la vida universitaria.

 

Ir a página principal

Copyright 1998 |©Tiempo Universitario | All rights reserved |
Director: Alfonso Yáñez Delgado
Gaceta Histórica de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla
México
gh